El pasado 19 de abril visitamos VR Arena, un parque de realidad virtual en Argentina, ubicado en Av. Corrientes 3266, CABA. Un lugar donde podrás tener distintas experiencias grupales e individuales que constan de tres zonas de entretenimiento: PlayStation 5, en donde podrás jugar a distintos juegos solo o con amigos sentados en unos cómodos sillones, VR Zone, la zona de realidad virtual individual con un área de 2×3 metros que te permitirá jugar tanto solo como con amigos que se encuentren al lado tuyo de manera online, y la VR Arena, la experiencia que probamos y sobre la cual te contaremos en detalle. Ambas zonas de realidad virtual utilizan los Meta Quest 3, por lo que la experiencia fue muy grata.
La VR Arena es un espacio grande en donde tendrás una movilidad libre por todo el lugar (limitado con cinta en el suelo) para marcar las distintas paredes u objetos que verás con el dispositivo colocado. Podés trotar y agacharte, pero no correr o tirarte al piso, por temas de seguridad, ya que no estarás solo. En este espacio podés competir y formar equipo con otros jugadores que se encuentran con vos en el VR Arena. En nuestro caso probamos tres juegos: Portal Strike, un shooter al estilo de Counter Strike, Portal Zombis, un juego en el que enfrentaremos hordas de zombis y por último Portal Mafia, un shooter de modalidad todos contra todos.
Portal Strike
El primer juego que probamos en el evento fue Portal Strike, una versión VR inspirada en el clásico Counter Strike, pero completamente inmersiva. Nos dividieron en dos equipos: azul y rojo. El modo de juego era un deathmatch por equipos donde el objetivo era claro: eliminar al rival la mayor cantidad de veces antes de que se acabara el tiempo.
Cada equipo comenzaba desde un extremo del mapa, con una zona central donde se concentraban los enfrentamientos. A nivel jugable, el título ofrecía un arsenal bastante completo: podías usar pistolas (una en cada mano), ametralladoras, fusiles, subfusiles y escopetas. Las armas incluían miras holográficas y la posibilidad de recargar bajando las manos, lo cual sumaba realismo. También había granadas, y la interacción con el entorno era clave: se podían romper paredes y objetos del escenario con disparos o explosivos, y era posible usar tanto las estructuras como la vegetación para cubrirse.
Nos presentaron dos mapas:
- El primero era un escenario estilo office, muy similar a uno de los mapas clásicos de Counter Strike. Estaba adaptado a la realidad virtual con detalles como cornisas por las que podías caer, huecos en las paredes, marcos para moverte tácticamente y elementos explosivos como garrafas o barriles repartidos por la arena.
- El segundo mapa tenía un estilo jungle, con casas para esconderse y vegetación densa que funcionaba como camuflaje. Este escenario incluía una escalera que conducía a una atalaya desde donde podías disparar con ventaja desde las alturas.
Algo curioso fue que algunos jugadores aprovechaban pequeños errores del sistema para atravesar paredes. Aunque esto podría verse como un fallo, en realidad aportaba un factor sorpresa inesperado y hasta cómico, que terminaba haciendo más divertida la partida.
Portal Zombies
Un juego del tipo PvE en el que todos los jugadores formamos parte del mismo equipo para enfrentar varias hordas de zombies en un mapa que tenía distintos pisos que podían ser recorridos. Estaba ambientado en una mansión con una estética terrorífica que se llenaba de distintos tipos de zombies; desde zombies básicos, zombies trajeados que estaban a punto de ir a un casamiento, zombies grandes, insectos gigantes y hasta un enemigo que parecía ser un guiño al icónico “licker” de la saga Resident Evil.
En el comienzo solo se podía elegir entre una pistola y un revólver, con la posibilidad de usar una en cada mano al mejor estilo “dual wield”. A medida que se iba avanzando en el número de rondas, las posibilidades aumentaban a escopeta, metralletas, ametralladoras y hasta un lanzagranadas. El número de enemigos aumentaba cada vez y era fácil verse rodeado, por lo que había que ser rápido para evitar esto. Si desafortunadamente éramos “desvividos” por algún enemigo, la reaparición o “respawn” demoraba solo algunos segundos para que pudiéramos volver rápidamente a la acción.
En el último nivel, apareció un boss gigante y aterrador frente al balcón de la mansión que escupía ácido y atacaba para hacer mucho daño. El detalle es que tal vez tenía demasiado HP (hit points) por lo que esta pelea puede sentirse más tediosa y agotadora que entretenida, por lo extensa y monótona. No obstante, quitando este detalle de la pelea final, fue una experiencia muy divertida, sobre todo teniendo en cuenta que todos estábamos en el mismo bando esta vez, lo que nos llevaba a avisarnos cuando un compañero tenía un zombie atrás y cooperar todo el tiempo, siempre mediante gritos desesperados y risas, como no podía ser de otra manera.
Portal Mafia
Se trata de un mapa de tamaño mediano con una estética bien marcada de los años 60, ambientado en un casino repleto de máquinas tragamonedas, muebles de época, autos antiguos, vestuarios y fajos de billetes desparramados por todos lados. A diferencia de los otros dos modos, acá no hay equipos ni enemigos en común: es un todos contra todos en el que hasta tus propias armas pueden jugarte en contra y eliminarte. El objetivo es sumar la mayor cantidad de puntos a costa de la vida de los demás jugadores, mientras intentás no convertirte en baja muchas veces durante el combate.
No se puede elegir con qué armas salir: cada vez que morís y reaparecés, el juego te asigna un arma al azar, lo que le suma una cuota de caos y adrenalina al asunto. La experiencia general fue caótica pero extremadamente entretenida. Nos la pasamos corriendo, buscando dónde cubrirnos, formando alianzas temporales que se rompían al instante, y riéndonos mientras nos traicionábamos. Un modo perfecto para pasarla bien entre amigos o en familia, sin tomarse nada demasiado en serio.
La experiencia se completaba con una TV ubicada en la entrada del espacio, desde la cual se podía observar a los jugadores en acción desde una vista periférica y de momento, como si estuvieras viendo una partida desde arriba y de momentos en primera persona. Todos estos juegos que probamos eran por rondas de 15 minutos, en el caso de Portal Strike cada uno de los mapas duró 15 minutos y al final de cada uno de ellos nos daban las estadísticas de las partidas para saber que jugador fue el que mejor desempeño tuvo.
Por último, cabe aclarar que desde la entrada hasta la salida tuvimos un muy buen acompañamiento de parte del equipo de VR Arena, quienes nos ofrecieron agua al finalizar la sesión (la cual vas a necesitar de lo agotado que vas a terminar), y nos aclararon que si necesitábamos ayuda o nos pasaba algo simplemente levantáramos las manos para poder ser atendidos. Si quieren reservar su lugar para vivir esta gran experiencia, pueden encontrar toda la información a través de su página oficial o a través de Instagram. Desde GamingCoffee les deseamos lo mejor al equipo de VR Arena y como última recomendación para darles a los futuros jugadores del parque es, vayan con amigos, que entre risas y gritos se la pasa mucho mejor acompañado.