Luego de disfrutar una pequeña parte del juego, retomamos la exótica historia de Road 96: Mile 0, pero esta vez experimentando completamente las vivencias de Zoe y Kaito.
INTRODUCCIÓN
Atravesando nuevamente Petria, pero en tiempos anteriores a Road 96, Zoe y Kaito son nuestros protagonistas. Estos adolescentes forjaron una amistad, incluso viviendo realidades e historias tan contrariadas.
Zoe, una joven bien posicionada, hija del ministro; Y Kaito, de lo que parece una clase de bajos recursos y discriminada, intentarán demostrar constantemente su punto respecto a lo que sucede y sucedió en la historia de Petria.
HISTORIA
Petria, el país gobernado por Tyrak, está sumido en una problemática política de la cual ambos personajes protagonizan desde sus perspectivas, permitiendonos decidir que postura tendrá cada uno, oponiendolos o alineandonos según nos parezca.
Zoe y Kaito ya parten con sus diferencias desde un primer momento, y el vivir realidades tan opuestas también acompaña a esos extremos. Kaito busca abrirle la mente a Zoe respecto al gobierno de Tyrak, en el cual está incluido su padre. Al mismo tiempo, ella está completamente confundida, y discute que no todo es como él cree.
Ambas historias no son fáciles: Kaito vivió en Colton City, una ciudad atrofiada por Tyrak, quien alardea ser amado por los ciudadanos de allí. Mientras que Zoe, dentro de la ciudad más lujosa, atraviesa el otro lado de la alta sociedad.
Kaito lidia con un odio sobrecargado al gobierno, según sus palabras, le quitaron a Aya, su mejor amiga. Y junto a esos acontecimientos carga también un accidente -o ataque- en el cual desaparece la madre de Zoe, y por el cual ella parece estar muy afligida aún, negandose la mayoría del tiempo a hablarlo. Dependiendo de las decisiones que tomemos tendremos un rumbo u otro, pero hay algo que se mantiene sin importar.
Con Zoe comenzaremos a tratar con un Kaito que pareciera ocultar cosas, mientras que Kaito suele estar a la mira de las autoridades, dudando sobre si su amiga es realmente quien dice ser. Planeando huir con su familia, Kaito se alía con los enemigos principales del presidente Tyrak, «La Brigada Oscura». El punto cúspide de ambos personajes sella en un archivo, el encuentro de este presentaría la realidad de lo que se conoce como «El ataque del 86», dándole la razón a uno de los dos.
JUGABILIDAD
La jugabilidad, como ya dijimos anteriormente es variada. Lo más importante de ella son las interacciones que modifican nuestra barra de ideales. Variando entre una Zoe dudosa -o no- sobre todo lo que conoce, y un Kaito revolucionario o «tranquilo». Las decisiones que tendrán consecuencias están señaladas con el símbolo al cual benefician. Tendremos interacciones que afecten alrededor de todo el mapa, el romper o arreglar un simple cartel puede cambiarlo todo.
Asimismo, fuera de las decisiones, contamos con minijuegos de todo tipo. Algunos de ellos no hacen parte de la historia y se encuentran en maquinas arcade repartidos por todo el mapa, y otros, aunque no afecten a la historia, son parte de ella. En el sentido del mundo, este cuenta con cuatro escenarios a los cuales podremos acceder, estas son ciudades, una plaza central, y nuestra guarida compartida.
Pero lo más conocido de la franquicia no es sólo su capacidad de jugar varias historias en una misma realidad, sino su gameplay rítmico. Este apartado con puntajes, quick-time events, y música, esta situado en cada situación crítica en el pensamiento de ambos personajes. El escenario y la música acompañan a la situación del momento.
Algo que críticar de este apartado es sobre la perspectiva. Como jugador casual se puede llegar a sentir enojo por las fallas «sin sentido» en los niveles, esto se debe a una combinación sobre la cámara y a dónde se dirige el personaje. Al morir reiteradas veces el mismo juego da las opciones de avanzar al próximo punto o reintentar.
GRÁFICOS
De Road 96 a Mile 0 se nota una mejoría gráfica, esto se debe al tiempo transcurrido entre ambos títulos, pero el característico estilo gráfico del juego sigue manteniendo su esencia.
La paleta de colores sigue siendo llamativa y variada, y los personajes mantienen ese diseño peculiar. Con cambios de colores y «vibraciones» cuando se entra en un momento de crisis, el diseño se mantiene, incluso en los fondos de los niveles rítmicos.
La vibraciones cuando la escena se torna catástrofica pueden llegar a dar la sensación de un bug si es la primera vez que atravesamos una, pero no es más que una mezcla entre el extraño diseño y la situación. Estos cambios en momentos críticos van acompañados de una absorción gráfica con un estilo de látido, esto combinado con los sonidos genera un ambiente totalmente abrumador, empatizando con el personaje.
SONIDO
Un título donde sus momentos críticos son niveles rítmicos no podía fallar en este punto. Con grandes referencias a bandas como «The Offsprings», y con canciones 100% comprometidas con la causa, cada melodía de este apartado busca trasmitir lo sucedido.
Con variación en los géneros de música, esto probablemente este arraigado al sentimiento de lo que intenta transmitir el juego. Los títulos de las canciones siempre tienen que ver con el nivel.
En su totalidad el juego tiene un buen apartado de sonido, con constantes anuncios presidenciales de Tyrak, comentarios de NPCs sobre lo que esta sucediendo, entre otras cosas. El estar atento a que se dice alrededor del mundo es algo importante para el juego, ya que escucharemos no sólo saludos, o información de lo que sucede, sino opiniones.
CONCLUSIÓN
Una extraña y variada jugabilidad, afectando 100% a la historia, que incluso con sus baches nunca nos logra desviar más allá del eje central de su historia. Personalmente buscaría solucionar los problemas con respecto a las perspectivas, pero con la opción de omitir, esa parte podría decirse que esta momentáneamente solucionada… aunque es la versión final.
Gráficamente «exótico», porque no existe una queja gráfica para un juego que se presenta con este estilo particular. Podría ponerse en juego aquí también lo de la perspectiva, ya que es parte de los gráficos también. Pero no es un tipo de juego que funcionase con gráficos más pulidos.
El sonido, como ya dijimos, era algo que tenía que deslumbrar, o al menos no fallar, ya que, en los niveles rítmicos, es el 90% del juego. Con su apartado músical en conjunto con artistas de renombre, el juego logra cubrir exitosamente sus fallas presentes.
Road 96: Mile 0 es una precuela interesante, con varios finales algo diferentes. Pudiendo vivir una historia completamente diversa en menos de ocho horas. Interpretando a dos personajes con realidades y creencias tan distintas, la abrumadora sensación que algo malo va a suceder que nos persigue constantemente nos hace dudar… ¿De qué lado de la brecha decidimos estar?
Esta precuela rítmica, con una jugabilidad disfrutable y emotiva, siempre llama al jugador a avanzar en la historia, o incluso, a buscar más allá.
Análisis
- Precio/Calidad
- Gráficos
- Jugabilidad
- Sonido/Música
- Historia